jueves, 6 de noviembre de 2008


La vida es como un ascensor cuando llega a un piso y se abren sus puertas. Uno nunca sabe qué puede llegar a encontrar del otro lado. Puede encontrar al amor de su vida, puede encontrar el sentido de su existencia, puede encontrar un mundo ideal sin guerras ni pestes. O lo más probable es que encuentre al señor de limpieza que le dice "No señora, ginecología es en el sexto piso"

2 comentarios:

Anónimo dijo...

que poeta!!! jeje!!!

;)

beso

Anónimo dijo...

Muy bueno y al final muy realista.